Home Staging Pro

Las palabras «home staging» significan literalmente «puesta en escena de la vivienda». Es una técnica del marketing inmobiliario que nació en EEUU pero que cada vez se está extendiendo más a nuestro alrededor. Consiste en mejorar el aspecto, la luz y la apariencia general de las viviendas en venta o alquiler y hacerlas más neutras y despersonalizadas para que gusten a cualquier persona, independientemente de su sexo, nacionalidad o edad.

Nuestro servicio de Home Staging en Donostia – San Sebastián utiliza elementos estéticos para conseguir resultados comerciales. Esto se consigue realzando las virtudes de una vivienda. A veces solo es necesario un poco de orden, una mano de pintura, o una pequeña obra en función de la prisa del cliente o del estado de la vivienda.

El objetivo último es conseguir que la vivienda se venda o se alquile en el menor tiempo posible. Es lógico pensar que si la vivienda causa una impresión más favorable, el resultado sea una venta más rápida.

Pero más allá del tiempo de venta, uno de los mayores beneficios de aplicar esta técnica de decoración, es que se consiguen más visitas comerciales. Gracias a la imagen renovada del inmueble y a unas fotografías profesionales, el inmueble se vuelve más atractivo y atrae la atención de más compradores potenciales.

Además el producto se percibe de mayor valor gracias al buen aspecto en el que se presenta y esto ayuda a conseguir ofertas al alza. Es decir, el home staging ayuda a conseguir el mejor precio posible, siempre dentro de la realidad del mercado.

Otro beneficio de utilizar esta técnica es que es una herramienta para conseguir más exclusivas. Las estadísticas están demostrando que las agencias que ofrecen los servicios de decoración inmobiliaria, poseen más y poderosos argumentos ante los vendedores para conseguirlas.

Otra ventaja es que las empresas que recurren regularmente al home staging u a otros servicios orientados a la mejora de la imagen, se posicionan en el mercado como referentes en marketing y publicidad. La mejora de la imagen del producto inmobiliario, repercute en la imagen de la marca que lo gestiona. La empresa aporta valor y ésto ayuda a que el cliente confíe en la gestión de la misma.